Enfermedad vascular

La sigla EVP hace referencia a ciertos tipos de aterosclerosis. Es una enfermedad progresiva en las que las arterias del cerebro, de los riñones y de las piernas se encuentran obstruidas. Uno de los tipos más frecuentes de EVP es la enfermedad arterial periférica (EAP).

Comprender la EAP

La EAP es un tipo de EVP que afecta solo las arterias, generalmente las arterias que irrigan a los brazos o las piernas. Esta afección puede causarle entumecimiento o dolor en las extremidades.

Debido a que la EAP se produce con mayor frecuencia en personas mayores de 50 años, este dolor en las extremidades se puede atribuir de manera errónea a un proceso natural de envejecimiento. Asegúrese de hablar con el médico acerca de la EAP si presenta este tipo de dolor o malestar, o si sospecha que puede tener otros signos de enfermedad vascular.

Ofrecemos muchas formas de diagnosticar los problemas vasculares y asegurarnos de que podemos ofrecerle la mejor atención posible. Algunas de las técnicas de diagnóstico por imágenes que utilizamos para detectar estas afecciones son las siguientes:

• Arteriogramas.
• Electrocardiogramas y ecocardiogramas (para detectar problemas cardíacos relacionados).
• Ultrasonografía Doppler para arterias y venas.
• Ultrasonidos.
• Pruebas de estrés.

Las enfermedades vasculares son afecciones graves, por lo que si presenta alguno de los siguientes síntomas, le recomendamos que busque atención médica lo antes posible:

• Decoloración del pie o de la pierna.
• Sensación de frío en las piernas y los pies.
• Dolor o calambres intermitentes en los brazos o las piernas (claudicación), especialmente si empeora con el ejercicio y disminuye con el descanso.
• Entumecimiento u hormigueo en los brazos, manos, dedos de los pies, pies o piernas.
• Llagas o úlceras en el pie o la pierna que cicatrizan lentamente (tenga cuidado, ya que este tipo de heridas que no cicatrizan son peligrosas, tenga o no la enfermedad arterial periférica [EAP]).
• Debilidad y atrofia de los músculos de la pantorrilla.

Si tiene calambres, entumecimiento o siente frío de manera intermitente en los brazos o las piernas, es posible que tenga signos tempranos de enfermedad vascular y debe ponerse en contacto con uno de nuestros especialistas cardiovasculares.

Nuestros equipos cardiovasculares y especialistas vasculares trabajarán en estrecha colaboración con usted para comprender su afección y determinar un plan de tratamiento que funcione para usted. Podemos comenzar con planes de tratamiento que se centren en métodos no quirúrgicos, como los siguientes:

• cambios en la dieta
• programas de ejercicio
• medicamentos

Si necesita una cirugía para tratar de manera eficaz sus problemas vasculares, ofrecemos muchas técnicas mínimamente invasivas, incluidos procedimientos endovasculares. Estos tipos de tratamientos están asociados a lo siguiente:

• incisiones más pequeñas
• tiempos de recuperación más cortos
• menos dolor
• menos estrés en el corazón

Realizamos cirugías vasculares como parte de nuestros programas avanzados de cirugía cardiovascular. Estas cirugías incluyen las siguientes:

• Angioplastia con globo: se utiliza un catéter especialmente diseñado con un pequeño globo, que se infla para abrir una arteria angosta u obstruida y aumentar el flujo de sangre al corazón.
• Stent carotídeo: procedimiento innovador, mínimamente invasivo y vital en el que se utiliza un catéter guiado por rayos X para mantener abierta la arteria.
• Stent intravascular: se inserta un stent para abrir una arteria angosta u obstruida y aumentar el flujo de sangre al corazón.
• Trombólisis intravascular: medicamento que disuelve los coágulos en los vasos sanguíneos y mejora el flujo sanguíneo.
• Aterectomía mecánica: se elimina la acumulación de placa de materiales grasos en las arterias enfermas.

Nuestra red de atención médica ofrece acceso a uno de los pocos lugares en la región donde se realiza la trombólisis acelerada por ultrasonido para tratar la trombosis venosa profunda (TVP), un tipo de enfermedad vascular periférica (EVP). Esta tecnología avanzada utiliza ondas de ultrasonido para dirigirse directamente a los coágulos de sangre y disolverlos. Con esta tecnología, se pueden tratar incluso los casos de TVP más complejos, y se evita la necesidad de realizar amputaciones y, en ocasiones, se salvan vidas.